Ingredientes:
- 1 l. de leche entera
- 4 cucharadas colmadas de harina
- 1 cebollita
- 300 g de carne limpia de pollo o pavo cocidos o asados Podemos utilizar la de hacer caldo, cocido etc. Vale pechugas, muslos… y también podemos aprovechar las migas repeladas del esqueleto del pollo.
- opcional: 1 blanquet, embutido de la zona de Valencia-Murcia que se cuece en el mismo caldo y le da un sabor especial tanto al caldo como a las croquetas
- pan rallado
- 1 cubito de caldo de carne o sal
- aceite de girasol para el sofrito de la cebolla (o de oliva flojito de sabor)
- aceite de oliva para freír las croquetas
- 2 huevos
Preparación:
- Picar la cebollita en el robot de cocina o a mano muy menuda y sofreírla con una cucharada de aceite
- Picar con el robot o cuchillo la carne deshuesada junto con el blanquet. Cuidado de que no se forme una pasta, que queden trocitos. Si resulta muy seca podemos añadir un poco del caldo del cocido
- Dorar un poco en la sartén la harina para evitar su sabor en las croquetas
- Añadir la leche, mejor caliente, poco a poco removiendo con el batidor de mano.
- Añadir la cebolla sofrita, el pollo y el cubito y seguir removiendo con la espátula de madera para que no se pegue al fondo de la sartén. Tiene que espesar bastante, notaremos que está cuando la masa se despegue de los bordes de la sartén
- Verter en un molde no muy amplio (yo uso el de plum-cake) y dejar enfriar bien, tapado con un paño para que no se reseque
- Cogiendo pequeñas porciones ir formando las croquetas y rebozarlas pasándolas por huevo batido y pan rallado
- Yo las pongo en una bandeja en el congelador y luego las paso a un par de bolsas cerradas. Cuando se van a usar, freírlas en abundante aceite caliente, unas 6 croquetas en cada tanda para evitar que se enfríe el aceite
